Muchos aspectos de nuestras vidas privadas han cambiado con la pandemia, pero a nivel más amplio también. En el caso de nuestro país, además, no sólo nos cruzamos con el coronavirus sino que con un estallido social que derivó en un proceso constituyente y hoy enfrentamos un cambio de gobierno que viene a cerrar un ciclo político de casi dos décadas y que podría traer cambios anhelados para muchos y temidos por tantos más. Y eso no es todo, sino que el contexto internacional se ve azotado por la guerra ruso-ucraniana y otra serie de factores. Así es complejo que el mercado no está algo alterado y se ha visto reflejado en todas las industrias.

Los aumentos de precios han sido bruscos en artículos esenciales como el pan o los combustibles, pero un mercado que no se ha analizado con la suficiente profundidad es el inmobiliario. Aumentó la demanda, pero los precios están en las nubes tanto para compra como para arriendo y ni hablar de las tasas crediticias. Expertos ya han anunciado que una generación completa podría quedar sin su sueño de la casa propia.

Mientras pensábamos en estos temas no cruzamos con un buen amigo de Revista Rúa, el destacado gestor inmobiliario penquista Jaime Laucirica Cohn. Sin pensarlo Jaime nos invita a su casa a conversar del tema que no es sólo su trabajo sino que su pasión y en el que tiene más de 25 años de experiencia.

Así con un cafecito caliente desarrollamos un tema que preocupa y ocupa a muchos vecinos de San Pedro de la Paz, según el propio Jaime, cuyos sectores residenciales son los que mayor demanda ha tenido en este período de pandemia.

“Veo con preocupación que la gente está muy desinformada y hay unas expectativas increíbles en cuanto a valores. Es cierto, las propiedades se han apreciado y ha habido una gran demanda en nuevos sectores residenciales lo que responde a diferentes contextos. Primero fue el estallido, el tema de la violencia provocó una importante migración, fundamentalmente porque las personas mayores buscaron paz y tranquilidad más allá de que les gustara el tema de la plaza, del café, del ir al banco, de desplazarse a pie”, comienza advirtiendo el gestor inmobiliario con un cuarto de siglo de experiencia.

“En segundo término está la pandemia, que nos obligó a estar encerrados y eso trajo consigo un fenómeno complejo. Los profesionales jóvenes, los millennials, que antes invertían en autos o viajes porque llegaban al departamentito de un ambiente a puro dormir, se dieron cuenta que ahora estaban todo el día ahí y tenían que dormir en la cama, comer en la cama, trabajar en la cama y se desesperaron, se dieron cuenta que necesitaban al menos un balcón, añoraban un patio , un poco de tierra ,estirar las piernas , poder hacer un asado , o sea más comodidades y los que tenían una buena situación empezaron a invertir en el mercado inmobiliario y subió rápidamente la demanda en sectores residenciales y el tema central , el ¡teletrabajo funcionó y llegó para quedarse!. Eso fue un batatazo y el mercado vendió todo lo que tenía y eso hizo que subieran los valores, fueron buenos tiempos los que nos dedicamos a esto en serio, pero hoy por hoy hay una expectativa irracional del valor de las cosas, el tema está bastante revuelto, nos encontramos con que hay poco stock de propiedades y este veranito de San Juan que tuvo la gente con los retiros se está acabando, hay aumento en las tasas de interés, inflación, la economía está compleja, entonces hay que hacerse asesorar por expertos, por profesionales, por gente que maneje el tema y no que sólo ande detrás de una comisión”, agrega.

El feliz vecino de Andalué luego explica que, “se han visto precios realmente disparados en estos años, pero muchas veces los dueños de casa simplemente fijan un valor sin aterrizar las expectativas, sin tomar en cuenta las condiciones en que está la propiedad, el sector, las comodidades, las condiciones de las casas vecinas y del barrio y principalmente una tasación real, de un tasador certificado, o de un banco, que es la que finalmente cuenta, por ejemplo, a la hora de solicitar un crédito hipotecario”.

Otro fenómeno originado en la pandemia también ha ejercido peso sobre el mercado inmobiliario en los últimos meses y según el profesional es uno de los más complejos de contrarrestar.

“Durante la pandemia muchas personas tuvieron que reinventarse, quedaron sin pega, sin sustento y buscaron en otras áreas y una de esas fue precisamente el corretaje de propiedades. No tengo absolutamente nada contra los emprendedores, lo apoyo, es más, lo mío es un emprendimiento, pero trabajar con las propiedades y sueños de las personas no es algo sencillo, es el esfuerzo de toda una vida para la mayoria de las personas lo que está en juego, no es algo que se pueda tomar a la ligera y eso es lo que pasa mucho. Muchos jóvenes se ponen a vender propiedades y simplemente las ofrecen a los precios que los dueños se imaginan, las ofrecen en sus grupos de WhatsApp, en las redes sociales y qué se yo y claro quizás más de alguno acepta los valores, pero a la hora de hacer el negocio el banco sólo le va a prestar lo que vale la casa según la tasación, entonces el cliente pierde tiempo, el banco pierde tiempo y el vendedor se queda con las ganas de hacer un negocio que parecía redondo y además se afecta al mercado porque los vecinos también quieren vender a lo mismo que ese primero la ofreció y así se crea una situación ficticia que altera el mercado”.

Si bien Jaime asegura que es un buen momento para hacer negocios en el área inmobiliaria ya que de a poco se están reactivado las construcciones de edificios y casas, la primera recomendación del gestor es asesorarse con gente de experiencia para que no pierdan tiempo, ni energía y sobre todo recursos.

“Nosotros tenemos más de 25 años de experiencia en el campo del corretaje de propiedades y gestión inmobiliaria, ya conocemos cómo funciona la cosa, a veces es duro bajarle las expectativas a un vendedor, pero es necesario, si la casa vale 10 simplemente no se va a poder vender a 50 un milagro donde el comprador tenga el efectivo y qué se yo. Hoy por hoy, el corredor no sólo debe sacar fotos y ofrecer las casas o departamentos, hay que ser un poco abogado, arquitecto, constructor, psicólogo, decorador, un poco terapeuta de pareja, saber de economía, de los movimientos del mercado y vincularse con una serie de personajes en la cadena que significa la compra-venta de un inmueble, desde ejecutivos bancarios, tasadores, abogados, notarios, conservadores, etc. Entonces claro puede parecer atractivo pasarle la propiedad al hijo de tu amiga que ahora está de ‘corredor de propiedades’ que te va quizás a cobrar una comisión más baja y te va a ofrecer la casa al precio que tú quieras, pero el porrazo puede ser grande y si eres el que va a comprar la decepción puede ser aún mayor”, apunta Laucirica.

Según el gestor inmobiliario asociado a la ACOP Y la ACP región del Bío Bío, el escenario es muy similar en otras regiones del país y en este mismo sentido es que Jaime está en un proceso de expansion , para atender en un futuro cercano particularmente Santiago y Pucón a través de una alianza estratégica con dos connotados expenquistas que llegaran a nivel de directores de su empresa, se refiere a Gonzalo Javier Aspe Neira, consultor de empresas y exitoso empresario del area hotelera, quien se hará cargo en la capital y a Enrique Alejandro Concha Matus, abogado de larga, exitosa y reconocida trayectoria, quien supervisará las acciones en la ciudad lacustre de la Araucanía, con oficinas que ofrecerán los mismos servicios que ofrece en el gran concepción Jaime Laucirica/Gestión Inmobiliaria .

Acercándonos al fin de nuestra conversación Jaime lanzó un número que nos llamó la atencion de su sitio web www.jaimelaucirica.cl … casi 2 millones de visita.

“Efectivamente”, nos indica, “fuimos de los primeros en tener nuestro sitio web cuando los computadores eran de caja. Fuimos de los más vistos en chile y lo seguimos siendo”, nos comenta con orgullo.

Finalmente nos comentó en la conversacion sostenida algo que nos impresiono bastante…“El otro día me comuniqué con unos clientes que están viviendo en Estados Unidos, clientes de más de 15 años que a esta altura son más amigos que clientes y ellos tienen una propiedad en San Pedro de la Paz, en el sector de la laguna chica y de alguna manera una inmobiliaria los contactó directamente a ellos para ofrecer cierto monto por la propiedad, pero ellos le dijeron que todas las decisiones inmobiliarias pasaban por nuestra empresa y que tenían que hablar con nosotros primero. Eso… eso es un tremendo orgullo, es un respaldo importantísimo para nosotros, es una señal de que estamos haciendo las cosas bien. en nuestra publicidad yo no pongo mi nombre ni mi cara por un tema de ego ni mucho menos, es como respaldo de mi trabajo, no tengo nada que esconder, tras la empresa está el hombre y el nombre que dará la cara ante cualquier problema y que responde siempre de manera profesional y directa, siempre con respecto y con modales”, dice apasionadamente Jaime Laucirica mientras conversamos en el living de su casa, sin máscaras y en medio de una situación de mercado llena de incertidumbres y vaivenes, donde la asesoría correcta puede llevar al éxito o completo fracaso en una operación inmobiliaria.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *