No solo los meses de verano implican vacaciones y descanso; hacer un alto a mitad de año y disfrutar unos días en contacto con la naturaleza, es un excelente plan. Las vacaciones de invierno ofrecen la posibilidad de escapar de la rutina, pasar tiempo con la familia y recargar energía. Ya sea para practicar deportes, o, simplemente, para descansar, la alternativa de pasar unos días en la nieve, es un clásico que se presenta como una posibilidad más que atractiva.
Una segunda piel
Disfrutar de la naturaleza en todo su esplendor requiere de ciertos cuidados. El tema es no pasar frío pero también moverse con libertad. Afortunadamente, en los últimos años, las ropas de nieve y el calzado outdoor, evolucionaron de la mano de los tejidos técnicos para posibilitarnos una mejor capacidad de movimientos y mayor comodidad y confort. La ropa térmica es imprescindible para paliar los fríos intensos. Se usa para mantener el cuerpo caliente y funciona como segunda piel al crear una capa aislante. Es, además, especial para quienes trabajan al aire libre o sufren las bajas temperaturas.
Tejidos técnicos
Los tejidos técnicos son telas sintéticas como el nylon (repele el agua y mantiene el cuerpo seco), el poliuretano o el poliéster (muy resistente al desgaste), con diferentes tramados, texturas y tratamientos que logran efectos importantes como la aislación térmica de algunas prendas.
Hacerle frente al frío
Tener en cuenta el tipo de ropa que vamos a llevar a nuestras vacaciones blancas, es de suma importancia para que podamos hacerle frente al frío, divertirnos en grande y aprovechar la mayor cantidad de tiempo posible. Por lo general la ropa para la nieve, está confeccionada con fibras sintéticas especiales que retienen el calor. Hay que evitar las ropas de algodón porque se mojan rápido. Son las prendas sintéticas las que facilitan la sudoración.
Teoría de las tres capas
Aseguran los entendidos, que optar por la teoría de las tres capas, es la solución para evitar inconvenientes indeseados como tener durante mucho tiempo la ropa húmeda. Esta modalidad, además, posibilita quitar o agregar prendas según lo pida nuestro cuerpo, que regula su propia temperatura interna.
En la primera capa, se usa la ropa que se ajusta y ayuda a mantener el calor. Las camisetas y las calzas térmicas, son las primeras prendas que toman contacto con la piel y es ideal que sean ajustadas para que permitan sudar y evacuar la transpiración.
La segunda capa, llamada también capa impermeable, requiere de lo que se conoce como ropa de abrigo y tiene por objetivo evitar la humedad. Sobre la camiseta y la calza es importante llevar puesto un buzo polar y pantalones. Estas prendas no calientan directamente sino que tienen la función de impedir la entrada del frío.
La última capa, la tercera, es la capa de protección, tiene como misión mantenernos secos, a salvo de la lluvia y la nieve y evitar que el frío se cuele. Las parkas para la nieve, las chaquetas y los pantalones impermeables, completan el atuendo.
Parkas y chaquetas, imprescindibles en la nieve
Una parka nieve es una prenda diseñada especialmente para ofrecer resistencia al agua y al viento. Por lo general está confeccionada en poliéster o nylon y por dentro está forrada con una tela cálida y aislante. Suele tener capucha, también forrada y muchas veces rodeada de piel sintética para proteger el rostro del viento helado. Es ideal que la capucha tenga visera y los bolsillos se sellen con cierres.
Algunas diferencias
Las parkas de nieve, a diferencia de las chaquetas, tienen capuchas. Las chaquetas para la nieve están diseñadas para ser más cálidas y resistentes al agua que las chaquetas urbanas. Están confeccionadas en poliéster, nylon o Gore Tex. El poliéster seca rápidamente pero no es transpirable, es decir, que no atrapa el sudor por lo que puede generar cierta incomodidad. El nylon dura menos tiempo que el poliéster pero es más asequible. El Gore Tex permite que el agua no llegue al interior del abrigo, debido a su impermeabilidad.

¿Qué debemos tener en cuenta al comprar?
Al elegir parkas o chaquetas de nieve, debemos considerar la suavidad al tacto, la comodidad, el peso, el aislamiento, la calidad de los cierres, las costuras de los puños (que evitan entrada de frío y agua) y, por sobre todo, nuestro estilo (hay gran variedad de colores y modelos)
Aislamiento térmico
En una chaqueta nieve o en una parka, es importante tener en cuenta el aislamiento que es la capa que mantiene el calor corporal por dentro y que puede ser sintético o natural. El natural es más caro pero también es más cálido y duradero (plumas de ganso o lana)
Iguales y diferentes
Aunque parecen iguales, hay algunas diferencias entre la ropa de nieve de mujer y las ropas de nieve hombre. Las diferentes marcas que ofrecen las tiendas especializadas en deportes de invierno, ofrecen chaquetas para hombres realizadas en tejidos impermeables y transpirables, ideales, además, para el día a día en los lugares donde el frío se hace notar.
Las ropas de nieve mujer son más ajustadas al cuerpo y tiene pequeños detalles femeninos que la distinguen. Los varones, en cambio, lucen la ropa de nieve más holgada; aunque los materiales que las componen son idénticos.
Un buen calzado, complemento ideal
Muchas veces, las chaquetas de nieve combinan con el color de las botas logrando un look más que elegante y destacado. Las botas deben ser de material blando, anti deslizables, resistentes al agua, con una suela y un tejido aislable. Acompañadas de calcetines de lana, son el complemento ideal para los días de nuestras vacaciones blancas.
Accesorios, siempre presentes
Los accesorios son también protagonistas en los equipos para nieve: bufandas, guantes, gafas de sol, pañuelo para el cuello y mochila pequeña para poder estar livianos, completan el look final que combina con la parka nieve. En el caso de practicar algún deporte; un casco, coderas y rodilleras, completan el equipo.
No solo durante el verano son imprescindibles las gafas de sol. También durante las vacaciones de invierno en la nieve, son un accesorio importantísimo debido a que los rayos pueden producir queratitis, cataratas, o conjuntivitis. Los cristales deben ser homologados con filtro que bloquee la radiación pero que nos permitan contemplar el maravilloso espectáculo blanco que nos brinda la naturaleza.